Alexis Kalergis director del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia valoró la importancia del reconocimiento y destacó los avances del antídoto en estudios clínicos.

En esta versión participaron más de 700 iniciativas para las 15 categorías. Los ganadores fueron dados a conocer en ceremonia realizada en TVN.

La primera vacuna creada en el mundo contra el virus respiratorio sincicial (VRS), desarrollada en Chile por el Dr. Alexis Kalergis –director del Instituto Milenio de Inmunología e Inmunoterapia, IMII y académico de la UC- obtuvo la máxima distinción de la XI versión del Premio Nacional de Innovación AVONNI, en la categoría Salud. Este año postularon más de 700 iniciativas para las 15 categorías, las cuales abarcan variadas áreas como recursos naturales, alimentación, cultura, diseño, entre otras. El Premio Avonni es organizado por la Fundación Foro Innovación, TVN y El Mercurio, además cuenta con el apoyo del Ministerio de Economía a través de Corfo.

En relación al reconocimiento obtenido, el autor de la vacuna señaló que “sin duda, este galardón es un orgullo para la ciencia nacional. Además, viene a coronar una etapa exitosa en nuestra investigación, especialmente ahora que estamos avanzando con éxito en la fase I de estudios clínicos de la vacuna. Esto, ya que su aplicación ha mostrado seguridad en voluntarios chilenos, según indicaron los informes”, confirmó el creador de esta innovación. “Además, nuestra vacuna recibió un informe muy favorable por parte de la Food and Drugs Administration (FDA) de EEUU, lo que indica un probable registro por parte de esta agencia regulatoria. Después del Instituto de Salud Pública de Chile, la FDA sería la segunda agencia acreditada en registrar la vacuna”.

Kalergis destacó los adelantos llevados a cabo en el país, en el marco de esta primera etapa de ensayos que implica tres grupos de voluntarios.

El director de IMII agregó que las pruebas en humanos, que actualmente se están llevando a cabo, podrían tener una duración de nueve meses y serán realizadas en el Hospital Clínico de la Universidad Católica de Chile. “Una vez demostremos que la vacuna es segura y efectiva, nuestro plan es canalizarla a la sociedad a través del Ministerio de Salud”. En ese contexto, explicó que las siguientes etapas, II y III, también podrían realizarse en el extranjero, en naciones como Estados Unidos o China, donde esta herramienta ya fue patentada.
Patentes internacionales

La vacuna ha recibido concesiones de patentes en varios países, incluyendo Chile, EEUU, Comunidad Europea, China, entro otros. El profesor titular de la Universidad Católica de Chile, celebró este vínculo con grandes mercados internacionales, gracias a los cuales “la vacuna ya cuenta con protección intelectual en estas naciones, lo que abre paso a su comercialización y uso en beneficio de millones de personas”.

El antídoto también fue patentado en otros países con apoyo de un proyecto FONDEF-Interés Público, adjudicado por el científico y su laboratorio. “Este hecho representa una contribución importante a resolver un problema de gran significancia para la salud pública mundial”, comenta el Dr. Kalergis.

Fundación Gates
El académico de la Universidad Católica de Chile, aprovechó la oportunidad para destacar los adelantos llevados a cabo en el país, en el marco de esta primera etapa de ensayos que implica tres grupos de voluntarios. El optimismo del científico, se suma al reconocimiento internacional que tuvo la vacuna por parte de la organización PATH, de EEUU, dependiente de la Fundación Gates, entidad que destacó “la relevancia de este antídoto para todo la humanidad”. Esto, considerando que aún no existe ninguna herramienta de salud que permita evitar los estragos de este virus, que año a año genera graves problemas respiratorios y hospitalizaciones en menores de dos años.
“Que una institución tan prestigiosa como PATH, líder en innovación en salud global y orientada al desarrollo de agentes respiratorios, destaque a nivel mundial la importancia de nuestra investigación en humanos es notable. Por varios años nos habían incluido entre los estudios pre clínicos, pero ahora –y gracias a que comenzamos los análisis en humanos – lo acaban de actualizar, incorporando nuestra investigación como una de las más importantes para el mundo en fase clínica I”, señala el director del IMII.
Medalla de Oro

Este año, el doctor en microbiología e inmunología también recibió la Medalla de Oro para inventores que entrega la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI).
El galardón, que se entrega desde 1979, destaca la importancia de los más de diez años de estudios del profesor titular de la Universidad Católica para encontrar una vacuna contra el virus respiratorio sincicial.
“Este reconocimiento demuestra que el trabajo científico que estamos realizando en el país es de orden mundial y nos motiva, tanto a nosotros como a otros grupos de investigación, a continuar realizando ciencia desde Chile para el mundo”, explica.
El director del Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia, es Bioquímico de la Pontificia Universidad Católica de Chile y Doctor en Microbiología e Inmunología del Albert Einstein College of Medicine en Nueva York–USA, donde posteriormente realizó un post-doctorado.

Actualmente se desempeña como profesor e investigador en el Departamento de Genética Molecular y Microbiología de la Facultad de Ciencias Biológicas y en la Facultad de Medicina de la Universidad Católica de Chile.

A lo largo de su carrera, ha publicado numerosos artículos científicos en revistas especializadas de alto impacto y contribuido en la formación científica de decenas de estudiantes de pre- y postgrado en el área de la inmunología.
Virus respiratorio
El virus respiratorio sincicial, VRS, es de alta incidencia en todo el mundo, y una de las afecciones que provoca mayor hospitalización y fallecimiento en menores de dos años. Principalmente en los inviernos y favorecido por el frío, contaminación y humedad, este microorganismo ocasiona bronquitis obstructivas, infecciones de vías respiratorias altas, así como neumonía en los casos más severos.
En Chile, el Estado invierte alrededor de 10 mil millones de pesos anuales en tratamientos, hecho que se suma al colapso de los sistemas hospitalarios. Por estas razones, el Dr. Kalergis estima que contar con la vacuna en el mercado “será de gran impacto en la comunidad afectada, en sus familias y también traerá beneficios desde el punto de vista económico, ya que permitirá prevenir los daños”.
Considerando que la mayor vulnerabilidad de contagio por el virus, ocurre entre los 0 y 2 años, la estrategia es poder aplicar el antídoto a las pocas horas de nacimiento del bebé. “El blanco principal serán los infantes y pensamos que con una sola dosis bastaría. Nuestra intención es llegar a reemplazar la actual vacuna de BCG, contra la tuberculosis y que la nuestra genere protección contra ambos patógenos”.